Sombra, agua y viento protagonizan el elemento más singular de una urbanización próxima a Murcia

Sombra, agua y viento. Estos tres elementos definen la propuesta del estudio de arquitectura Sancho-Madridejos para el elemento más singular de una pequeña urbanización residencial situada cerca de Murcia. Se trata de una cúpula abierta de notables dimensiones que genera un reparador espacio de relajación y observación del paisaje circundante.

El estudio que dirigen en Madrid Sol Madridejos y Juan Carlos Sancho recibió el encargo de proyectar un complejo residencial compuesto de alrededor de cuarenta viviendas unifamiliares en la pedanía de El Esparragal, cerca del casco urbano de Murcia. El elemento más destacable planteado por el estudio es la inclusión de una construcción singular que se hace muy visible desde el entorno y constituye el punto de referencia del proyecto.

Una gran cubierta plegada de hormigón acoge un íntimo rincón refrescado por la presencia de una lámina de agua. En el extremo este del complejo residencial se sitúa el espacio de la sombra, el agua y el aire que dispone de un microclima propio propiciado por la ocultación del sol que procura la cubierta plegada.

“El proyecto surge inicialmente como respuesta a las peticiones particulares de un cliente privado: por una parte, diseñar un conjunto residencial con la mayor diversidad entre viviendas y, por otra parte, incluir un elemento singular visible desde el entorno como punto de referencia y que forme parte de nuestro trabajo de investigación en torno a los pliegues”, explican desde el estudio.

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